HAROLD VÁSQUEZ - Ondas Libertarias - Ideas Ruidosas - Aterrizaje Forzoso - Stereo Chile

Me llamo Harold Vásquez, soy de Iquique,  tengo 40 años, soy del año 76 y llegué a vivir a Valparaíso, en Marzo de 1995.

Mi vida siempre ha estado marcada por la radio. En Iquique escuchaba radio, aunque en mi barrio había solamente una radio comercial, pero a la cual los niños del barrio teníamos acceso y entrábamos al patio. En ese tiempo hacían ranking de las canciones y tocaban las que más se elegían. El DJ que trabajaba en la radio, lo hacía  con casettes y discos de vinilo, porque no existían, como ahora, los medios digitales.  Entonces como que siempre estuve ligado a escuchar radio. 


Llegué a Valparaíso a la Universidad Santa María y vivía en una pensión en el Cerro Los Placeres, donde seguí escuchando radio. En ese tiempo estaba el boom de la Radio Rock and Pop, que era una radio juvenil que no llegaba a Iquique, parece que solamente se escuchaba en Santiago y Valparaíso.  Y ahí, haciendo zapping un par de veces, escuchaba una radio que se notaba que era una radio distinta, por su calidad sonora, por lo que me llamaba la atención. 


Y comencé a escuchar Radio Placeres. En ese tiempo vivía en la parte baja del Cerro  Placeres, un par de cuadras más arriba de la Universidad, y como el cerro es gigante, yo pensaba que la Radio Placeres estaba en lo alto del cerro, por allá arriba….y nunca se me ocurrió ir. Aparte que por mi preconcepto, escuchaba que era así una radio como de izquierda, y para mí la izquierda era como PC, y el PC a mí nunca me atrajo. Y escuchaba que hablaban harto en ese tiempo del subcomandante Marcos, porque había sido el levantamiento en armas en Chiapas; también escuchaba noticias internacionales de la Red de Radios, y entonces siempre hablaban por ejemplo de Fidel Castro, de Cuba, Centroamérica, entonces como que eso alimentaba mi preconcepto.

Bueno, la escuchaba algunas veces, nunca me quedaba escuchándola, sino que pasaba nomás, como que sabía que existía. Luego, en la Universidad, con un grupo de amigos y amigas, formamos un Colectivo Anarquista, ya que no teníamos referente acá en Valparaíso del anarquismo. Nos creíamos el hoyo del queque, no conocíamos a nadie, a nadie adulto tampoco. Eramos puros cabrxs, y comenzamos a participar de movilizaciones y de actividades. En ese tiempo conocimos un grupo que se llamaba “Acción Contra la Indiferencia”, que para nosotrxs fue reinteresante, porque era un grupo de gente bien diversa, que estaban en la misma de uno, de la izquierda tradicional y de la otra izquierda, en esta seudo democracia.


Hay que recordar que el 95, 96, Pinochet todavía estaba de comandante en jefe de las FFAA, un detalle no menor para las nuevas generaciones, que no cachan eso. Importante, porque estaba ahí el huevón,,,,, entonces este grupo era un grupo de pura denuncia nomás. Nos parábamos ahí, en un lugar específico que correspondía a lo que decía nuestro lienzo, leíamos la proclama, repartíamos información y después nos íbamos. 

Y en ese grupo de personas, conocí a la Eliana de la Radio Placeres. En ese tiempo, y todavía sigue, el conflicto mapuche siempre ha estado fuerte, pero en esos años hubo un movimiento fuerte en Lumaco. Pero justo vinieron a  Valparaíso, en busca de solidaridad, un grupo de mapuche que, si no me equivoco, eran de Lumaco. Y ahí la Eli nos invitó a un plato único, a un plato solidario en el local de la Radio Placeres. Y en esta actividad con este grupo de mapuche, compartiendo con ellos, conocimos el espacio físico de la Radio, como lugar, como espacio, como medio de comunicación. 

Eran los años 97, 98….. El 97 se hicieron hartas movilizaciones, porque Pinochet iba a dejar de ser comandante en jefe para ser senador y en Marzo del 98 Pinochet jura como senador vitalicio. Y ahí comenzamos a conocer otros cabrxs, de la Católica, de la Upla, y en una de esas marchas, vimos a unos viejos con un lienzo anarquista y nosotrxs quedamos en otra……preguntando quienes eran, porque no teníamos en ese tiempo referentes vivos del anarquismo. Y por esas cosas del destino, comenzamos a conocer gente en Santiago y decidimos hacer un Encuentro Libertario, que era como el “nombre light”.


Lo íbamos a hacer en distintos lugares y entre esos lugares, surgió el local de la Placeres. Ibamos a conseguirnos el Club Deportivo para hacer una tocata, para hacer una plenaria, y en la plaza íbamos a hacer una actividad; además íbamos a dar una charla en la universidad. El asunto fue que la universidad de un día para otro tiró para la cola y no nos prestó la sala. Entonces todo el Encuentro se hizo en el local de la Radio Placeres, en el Centro Cultural Arauco, que era el nombre de la personalidad jurídica. 

Previo al Encuentro nos entrevistaron en varios programas de la Placeres, que era una forma de difundir el Encuentro. Y el Encuentro se dio superbién en la Placeres. Yo hablo de nosotrxs, porque en ese tiempo eran las cosas que hacíamos y conversábamos en grupo.. Nos comenzamos a sentir comprometidos con la Radio, porque habían confiado en nosotrxs, nos prestó el espacio, y las personas de la Radio fueron superbuena onda. 

Entonces nos comenzamos a sentir como que nos decían que cuándo íbamos a hacer algún programa, nunca lo dijeron de manera específica, pero nos sentíamos así. Porque ya éramos como invitados de siempre. Por ejemplo, yo iba siempre como invitado al programa de Felipe Montalva, ya que yo traía música de Iquique cuando iba de vacaciones, tenía amigos en Antofagasta, en Arica, entonces siempre había música por ahí dando vuelta.


En ese tiempo, los grupos grababan demos en casette, entonces siempre traía música que no se conocía por acá. Yo prestaba los casettes, participaba, iba a chacharear, entonces como que participábamos de la Radio Placeres, pero no teníamos un programa en específico.

Hasta que en Enero del 99, comenzamos al fin con nuestro programa radial, que se llamaba “Ondas Libertarias”, y éramos como cuatro compas los que hacíamos el programa. Estaba el Adrian, que debe de estar en Alemania, Marianne que está en Santiago, la Claudia que también debe estar en Santiago y yo. 

Bueno y después de ese primer Encuentro Libertario, nosotrxs –que éramos como cuatro o cinco-, crecimos en hartas personas, pero no tanto en calidad, porque éramos como el psiquiátrico. Cualquier loco que creía en la anarquía de cualquier punto de vista, se acercaba a nosotrxs. Entonces con nosotrxs estuvieron personajes muy bizarros, muy extraños,….. y que también pasaron por la Placeres. Acogíamos a todos, éramos realmente un psiquiátrico.También recuerdo que al programa se agregaron el Eduardo, el Daniel, y dentro de todos estos chicos y chicas que participaban, estábamos todas las diferentes tendencias del espectro anarquista. Como el antimilitarismo, la emancipación de la mujer, el vegetarianismo, el punk, etc. etc., con todas las tendencias. 

Pero, en definitiva, en Enero del 99 hicimos nuestro primer programa de “Ondas Libertarias” y que se transmitía los sábados entre las 7 y las 8 de la tarde, si mal no recuerdo.



Estábamos bien en pañales. Tengo grabado en casettes el primer y el segundo programa y algunos de los siguientes, y me da vergüenza escucharlos. Pero en ese tiempo no teníamos acceso a libros sobre anarquismo, hoy puedes bajar de Internet cualquier libro. 

Comenzamos a conocer algunas personas de Santiago, algunos habían ido a un Encuentro Anarquista en Uruguay y habían traído algunos libros. Un amigo de Valparaíso, Gregorio Paredes, que también es anarco y que era adulto, se compró todos los libros que llegaron. Nosotrxs con suerte, ubicábamos en la Biblioteca de la Santa María, algunos títulos de clásicos del anarquismo. Lamentablemente se los robaron después, y la Biblioteca de la Santa María, evidentemente, no los repuso. Hablo por ejemplo de una edición de 1910 de Prudhomme, de Argentina, y otros…… 

Cuando llegué por primera vez a Valparaíso, me consideraba como anarquista intuitivo, y leía a Manuel Rojas, que era lo más cercano que tenía. Como que tenía una idea vaga sobre el tema. Entonces nuestros primeros programas eran superbásicos, ultrabásicos, El Centro Cultural Arauco, nos prestaban el espacio también para nuestras reuniones, por lo que la Radio era nuestro centro de operaciones, se podría decir que en algún momento la Radio Placeres fue el centro de los anarquistas de Valparaíso. Eramos los anarquistas que dábamos la cara. Ahora quizá es mejor estar en las sombras que dar la cara, porque los que damos la cara estamos todos fichados. 

Dentro del programa teníamos un segmento que se llamaba “Ideas Ruidosas” que, a la postre, terminó también convertido en un programa. Entonces el programa “Ondas Libertarias” era como el programa ideas, de la teoría, e “Ideas Ruidosas” era como el programa de la música. Entonces tratábamos de salir del ghetto de la música punk 
anarquista, y buscábamos hip hop, marchas anarquistas antiguas. 

La Radio para nosotrxs era un medio, y en el espacio de la Radio también hacíamos charlas, y pláticas. En ese tiempo todos los que cumplíamos 18 años teníamos que inscribirnos para el Servicio Militar Obligatorio, estábamos con la bota encima. Ahora el tema es más voluntario, ….. pero en ese tiempo era obligatorio. Y se creó un grupo de Objeción de Conciencia, antimilitarista, al alero de un grupo de Santiago que ya tenía un tiempo de trabajo  El Serpaj (Servicio Paz y Justicia) nos prestaba su patio; entonces un grupo de nosotros se especializó en ese tema, hicimos acciones masivas de conciencia antimilitarista en Valparaíso; también habían grupos por la liberación animal, creo que no es pretencioso decir que fuimos de los primeros que hablamos de la liberación animal, del antimilitarismo, de la permacultura, etc.


Pero todo eso era para nosotrxs a nivel teórico, no práctico. En cambio ahora, en el tema de la permacultura hay un montón de chiquillos y chiquillas que lo llevan a la práctica de manera total. Pero en ese tiempo, fuimos un germen, una piedra en el zapato, ahí, molestando, nadando contra la corriente, nos costó harto, teníamos harto miedo también, éramos como medio paranoicos, porque nos sucedían cosas raras. Aparecían personas extrañas de civil pidiéndonos carnet de identidad, seguimientos medios obscuros, cosas muy raras nos pasaban. Ahora esto es más latente, ya hay cabros encanados, detenidos, pero en ese tiempo no era tanto así. Pero nosotros notábamos que nos vigilaban, finalmente éramos públicos, por lo que estábamos totalmente identificados. Pero a mucho orgullo lo hacíamos. 

Como hecho anecdótico nosotrxs, como punk, organizábamos tocatas con grupos extranjeros. Entonces para nosotrxs la trilogía era la siguiente: programa radial especial con el invitado, una plática en la Radio y finalmente la tocata. Y eso lo hicimos como cuatro o cinco veces.con grupos argentinos, venezolanos, mexicanos. Como anécdota, como en Mayo del 2000, vinieron unos amigos de México, que tenían una banda que se llamaba Coprofilia. Ese año en México estaba en huelga la Universidad Autónoma de México, que estuvo como 11 meses en huelga, y ellos venían a dar una plática sobre la huelga de la UNAM.


Traían un video y además iban a hablar sobre unas comunidades zapatistas, en un lugar que se llamaba Loxicha. Hicimos un afiche bien incendiario, los pegamos en la calle y ese día de la plática llegaron los pacos a la Radio, al Centro Cultural Arauco, pensando que íbamos a salir a la calle a hacer barricadas. Llegaron preguntando quien organiza esto, quien va a venir y nosotros sorprendidos…. O sea, el alcance que había tenido una plática sobre una huelga universitaria, que quizá los movimientos estudiantiles de estos últimos años en Chile, nunca se enteraron. Pero los mexicanos estuvieron casi un año en huelga, y lo que vimos con las huelgas en Chile,  nosotrxs ya lo habíamos visto en México en el video, las familias protestando, era increíble ese video. 

Bueno, después como ocurre, la gente del programa se fue renovando; hubo gente que partió, otra que llegó. Yo estuve toda esa época, también la Claudia, pero el resto se fue renovando. Y el 2001, como paralelo a la Radio, establecimos un espacio callejero, que la llamamos la Feria de la Cultura Libertaria, en donde difundíamos todo el material disponible, lectura, música y estética, chapitas, pulseras y otros. Para mí la estética es rebeldía y la cosmética algo superficial. Entonces la trilogía se transformó en cuatrilogía, programa, plática, tocata e ir a la feria. Era muy entretenido, porque los sábados hacíamos el programa, invitábamos a la gente, y el domingo llegaba la gente a la feria. Para mí era terapéutico, porque estudiábamos o trabajábamos toda la semana, y llegábamos el día sábado que nos veíamos, teníamos nuestro programa, nuestra reunión y al otro día, el domingo, en la feria nos juntábamos. Para mí era entretenido, era bonito. 

La Feria la hacíamos en la Plaza O’Higgins. Hay experiencias previas que se hicieron con la feria en la Radio, pero en ese tiempo no había tanto material para vender, entonces era como una especie de biblioteca ambulante. Exponíamos los materiales en la Radio y de repente llegaban cabros y cabras a leer, pero la afluencia de público no era tan masiva. Entonces era desgastante, estar como tres horas ahí esperando que llegara alguien y de repente no llegaba nadie. 

A la Plaza O’Higgins llegaba mucho más gente, que era también la diferencia que yo marcaba entre la Plaza O’Higgins y la Avda. Argentina. Nosotrxs no vendíamos música pirata, no vendíamos cosas choreadas,  y tampoco vendíamos cosas usadas. Entonces la Plaza O’Higgins estaba mejor y si llegaba algún extranjero anarquista, era más probable que fuera a esa plaza que a la Avenida Argentina. Y nos pasó, que en algún momento pasaron anarquistas franceses, alemanes, españoles, y después en el tema anarquista, la Radio Placeres pasó fronteras, era como un referente.


De hecho mucha gente pensaba que la Placeres era una radio anarquista, porque grabábamos programas radiales y los enviábamos a amigos en el exterior, para que los escucharan. Les enviábamos los casettes, fotos que en ese tiempo eran de papel, no virtuales. Y teníamos vínculos hasta en Grecia, que querían aprender español. Nos enviaban afiches, música griega, y también nos llegaban de otros países. Entonces todos ellos cachaban que existía la Radio Placeres y nos enviaban colaboraciones, música sobre todo, para difundir en la Radio. Entonces se daba algo superinteresante. De hecho una vez me entrevistó un amigo, periodista brasilero, y él también pensaba que la Placeres era radio anarquista. Y ahí le tuve que decir que no, que era el programa radial y que mucha gente era cercana al pensamiento, y que las otras personas de la Placeres eran de izquierda, bastante autónomas, pero no precisamente anarquistas. 

Entonces la experiencia de la Radio Placeres, para mí fue superbonita. Echo de menos  hacer radio, nos escuchaban cabros hasta de Quintero en ese tiempo. Cuando estaba despejado, el éter nos permitía llegar hasta ese lugar, porque no habían cerros entremedio. Pero algunas veces no llegábamos ni a la quebrada de Recreo, que estaba al lado. 

Había gente que nos contaba que grababa nuestros programas, para tener música. Y era lo mismo que yo hacía cuando era chico. Mi amigo de Iquique, que era DJ, tenía una tía en Santiago que le grababa música de la Radio Carolina y se la enviaba. Y después entonces, él hacía las mezclas en vivo y en directo. Yo escuchaba a Rolando Ramos, que tenía un programa en la Radio Rock and Pop, porque el loco también ponía música rara, difícil de conseguir y la grabábamos; o bien, los primeros programas punk que se hacían en Santiago, música subterránea , y otras, los grabábamos y pasaban de mano en mano. Entonces que con nuestro programa de música sucediera eso, era increíble para nosotros. Hasta el día de hoy me encuentro con gente que me comenta: Oye, tú organizabas tocatas,hablabas en la Placeres, …..


En ese tiempo, habían cabros de 15 años que me felicitaban, aunque yo encontraba que nuestro programa de entonces era superbásico. Pero a nivel de las joyas musicales que poníamos, estaba rebien.

De repente es como que añoro esos tiempos, pero en la actualidad yo quiero escuchar punk, voy a un buscador y encuentro lo que quiera, de todos los estilos. Pero ya no tengo tiempo por un lado, y por otro a la gente a lo mejor le va a parecer más interesante escuchar, Radio Bronca de España, para escuchar música anarquista. 

Y lo otro, para mí también era interesante escuchar el programa que estaba antes que nosotrxs, y el programa que venía después. Eso era bonito, porque ahí estabas construyendo comunidad. En cambio ahora hay mucho por conectividad, no hay de pronto tanto contacto personal. De lo feo que hubo en algún momento en la Placeres, a lo mejor lo cuento otro día. 

Una vez hicimos un Encuentro de Hip Hop, con amigos de Santiago, que eran de hipnología punk anarquista, que creían en la organización social de base. Nos apoyaron e hicimos una actividad en el cerro, un break dance, con música en vivo, fue superlindo.


Pero también recuerdo cuando nos robaron los equipos, hicimos una actividad en la plaza y hubo gran apoyo de la gente, no solamente del cerro, sino que de otros lados. Yo sentía siempre que la Radio Placeres era un medio importante. Hicimos historia y ahora la Radio sigue haciendo historia. Y son cosas pequeñas, que no es que no las valorice en su momento, pero no piensas que van a trascender tanto. 

En mi caso, por ser iquiqueño, siempre que iba a Iquique, entrevistaba a mi mamá, que es pobladora popular, y se lo pasaba a la Eli para que lo programaras en su programa “Palabra de Mujer”. Mi mamá era vecina de las familias de las niñas de Alto Hospicio que mataron. 

También cuando iba a Iquique entrevistaba a mis amigos de toda la vida, sobre música, no solamente punks, sino amigos metaleros. Entrevistábamos a los cabros, traía la música para el programa, y después les enviábamos la grabación. 

Con el paso de los años, también participé en el programa “Stereo Chile” con Felipe Montalva, una persona muy importante en lo que ha sido la Placeres. El se tuvo que ir a trabajar en otros lados, y quedé con el programa, con el Alberto Warrior también.  Nos costó hacer el programa, porque el Felipe es superculto, supersabio; él sabía hacer radio superbién. Además era de Periodismo de la UPLA, y como persona era superprofesional para hacer el programa. Pienso que nunca igualamos la calidad del programa que hacía el Felipe, nos costó caleta, pero ahí estábamos. En este programa yo me encargaba de la parte del Norte, poner música de esos lados, principalmente punk, que a mí me apasiona, pero tratando de conseguirme hartas cosas. Difundir bandas metaleros iquiqueñas en ese tiempo, por acá, era importante.

En Iquique había un programa que se llamaba “Aterrizaje Forzoso”, que era un programa diurno de psiquiatría. Un día voy por la calle y veo un afiche de Aterrizaje Forzoso, y yo pensé que era un recital de la banda, pero veo que es un programa radial. Y como el programa era grabado, voy al espacio físico y conozco a la Marcela, que era la niña que participaba allí. Ella conocía a gente de Valparaíso, conocía gente de La Colifata en Argentina, y participé varias veces en su programa radial. Y los del psiquiátrico también pensaban que yo era un loco…. Porque ellos iban en la tarde a la Casa Club, que se llamaba y ese programa era como parte de su rehabilitación. Entonces, yo traía programas de allá y los transmitíamos en la Radio Placeres, como “Aterrizaje Forzoso”. Y como que toda esa experiencia servía como para crear una red, una red que traspasara el cerro Placeres y llegara a más regiones. 

Y dentro de esa red, otro recuerdo hermoso que tengo, es que la Daniela y la Lay Jan que hacìan un programa “El Adoquín de Papel”, tenían un trabajo interesantísimo en la cárcel, en trabajo de literatura y difundían ese trabajo que hacían allì y también tenían un boletín literario llamado “Pablo de Rokha”. En un momento dado, el programa Adoquín de Papel dejó de transmitirse y nos pidieron ayuda a nosotros, que éramos el programa anterior a ellas, para que leyéramos su trabajo literario. Entonces, con ese vínculo de leer su boletín, yo fui a la cárcel a visitarlos, para conocerlos.


Por esas cosas de la vida, Jorge Saavedra que era el que dirigía el boletín, era iquiqueño, igual que yo. Ahí creamos un vínculo, y hablábamos del anarquismo. Entonces, nosotros difundíamos su trabajo y como yo también tenía vínculos con los cabros de la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago, se hacía todo un trabajo con los casettes para enviar noticias y declaraciones para difundir. Entonces Jorge hacía lo mismo y se transmitía por un programa, que también lo transmitió la Placeres, que se llamaba “Limpiando Vidrios”. Yo lo encontraba una experiencia única……como también fue una experiencia única la que tuve en la Radio Placeres.

Un día de fines del 2002 llego a hacer el programa, y como no había asistido a la asamblea previa, al llegar me entero que es el último programa de la Radio Placeres. O sea, a mí me tocó cerrar la puerta por fuera de la Radio Placeres en esa fecha. Y ese día llevaba un invitado, un amigo que tocaba armónica, de un grupo llamado Los Revoltosos. Si no me equivoco, estaba Giovanni, Cristian Zúñiga creo también y alguien controlando. Fue un día supertriste, despedirme así de la radio, porque yo sabía que cuando la radio volviera, yo ya no iba a estar. Sabía que después iban a ser otras personas, otro manejo de la Placeres, y yo me sentí muchas veces como una persona non grata en la Placeres. Dentro de todo, además de participar harto en la radio, éramos problemáticos. En algún momento, yo decía que para nosotros la Radio era un medio, y a lo mejor en algún momento se puede haber transformado en un fin. 

En esos últimos años, yo dedicaba toda mi  vida a la radio, Como que el programa radial era tan importante como la radio misma. Porque sabíamos que la Radio Placeres era un bastión, que teníamos que cuidarlo y protegerlo. Entonces llegó ese día y fue tan triste….Tocar la última canción; recuerdo que pusimos una canción de hipnología, lo recuerdo claramente, y la cuña de cierre. Porque en ese tiempo la Radio tenía cuña de inicio y cuña de cierre.

Después la Radio volvió el 2004, como Radio Placeres. Entonces para mí ya no era la misma Radio Comunitaria Los Placeres. 


Marzo 2017


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