[Integrante del Equipo Reorganizador Radio Placeres año 2004]
Yo
siempre miré la Radio como de lejos, quizá porque estaba haciendo mis primeras
armas en la política y en el periodismo, sabía de la radio, incluso la
escuchaba a veces, porque en ese tiempo se escuchaba mal la radio; se escuchaba
en Placeres y en algunas partes de Valparaíso, pero mal. Era más el mito de la
Radio Placeres, ya en ese tiempo.
Incluso algunos amigos me invitaban a la Radio y yo aceptaba, pero no
muy convencido. Entonces comencé a ir a algunos eventos. Conocí las dos sedes –no la de Andre Jarlan,
yo era muy chiporrito en ese entonces- pero conocí la sede del Deportivo y la
sede del comunitario. Fui a tocatas,
platos únicos, fui a una película, a un encuentro anarquista y así me empecé a
vincular de a poco, pero siempre en calidad de usuario.
Pero
también me empezó a picar el bichito, a lo mejor yo puedo hacer algo con
radio. Quizá yo pensaba en ese momento
que la radio no era lo mío, porque nunca he tenido muy buena dicción, ni
modulación, hablo muy rápido, no se me entiende, entonces yo siempre con la
onda de que la radio no era lo mío. Tampoco la escritura, yo no escribía mucho;
en realidad yo no sabía qué estaba haciendo en Periodismo, de verdad. Más que
nada me gustaba el periodismo por el
dinamismo, por la actividad, por el movimiento, por la cantidad de cosas que se
podía hacer, pero no tenía ninguna expectriz o talento para la disciplina, que
el periodismo clásico fomenta. El año 91 también, se tiene que bajar la radio,
en espera de la nueva ley, y vuelvo a vincularme a la radio, en ese año 95 y
principios del 96.
Salgo
de Periodismo, a fines del 95 y en marzo del 96 me titulo. En abril del 96,
caemos presos, en el caso titulado “Los Cuatro de Valparaíso” como nos
conocieron en Santiago. Después de dos años, finalmente vuelvo a Valparaíso y
ahí me comienza a picar más el bicho por la Radio Placeres, como a acercarme
más, a hacer otras cosas. Empecé a ir a unas Jornadas Anarquistas que hacían en
Radio Placeres, con compañeros como el Harold, la Claudia y me acuerdo de un
viejo marxista que era bien conocido, de lentes gruesos, alto, no recuerdo el
nombre. Sí recuerdo que a ese encuentro
anarquista, lo encontré en el plan y nos fuimos juntos; nos fuimos a pie, y llegamos sudados, pero llegamos…..Ese
encuentro no recuerdo bien la fecha, pero tiene que haber sido entre el 98 y el
2000.
Y
otros amigos míos, estudiantes de periodismo, hacían actividades en la
Placeres. Entonces era como que muchos amigos míos hacían cosas en la Radio,
pero yo todavía me mantenía como usuario y observante nomás.
Ya
el año 2001 quiero hacer algo con la radio, pero finalmente cuando nuevamente
me acerco a la Placeres el año 2003, encuentro que estaba ya para la historia,
había una debacle, administrativamente con muchas deudas, con muchas peleas
internas, y yo no cachaba qué pasaba, porque no me esperaba eso. Sabía que
habían problemas, pero normales en toda
asamblea, cosas humanas o de piel o
políticas, pero no pensé encontrarme con una radio en una debacle, con una
dirección cansada, un grupo anarquista
fuerte, con posturas muy radicales,
peleas entre otros integrantes…… y me encuentro con eso. Pero yo ya
estaba envalentonado por insertarme en la Radio, no iba a echar pie atrás. Pero
encuentro que justamente la Radio se va, yo escuché la última salida al aire,
el último programa al aire, cuando se ponen a llorar y ahí ya comienzo a
juntarme con algunas personas de la radio.
Y
ahí conozco a otras personas de la radio, que me presenta Felipe, al Cristian,
al Arica –que también estaba recién comenzando en la radio- y nos juntamos con
Pato, quien había guardado los equipos en su casa y decide él no entregar los
equipos hasta saber a quien se los va a entregar, que hubiera una seriedad y
que la Radio continuara, pero en ese momento, él no sabía a quien
entregárselos. Así es que formamos un grupo chico, una especie de equipo
editorial, donde estábamos cuatro, Cristian Zúñiga, Arica, Esteban y yo, y
estuvimos juntándonos todo un año con el Pato Contreras, casi semanalmente. El
Pato nos hacía escribir cosas, cómo veíamos la Radio, qué queríamos de la
Radio, qué es ser placerino. Entonces escribíamos, compartíamos los textos, y
discutíamos, pero todo en muy buena onda. Hasta que el Pato se dio cuenta que
efectivamente podía confiar en nosotros.
Ahora,
ahí es cuando quisimos cambiarle el giro a la Radio. Queríamos hacer una radio
más masiva, más popular, técnicamente mejor. Entonces, desde ese punto de
vista, algunos de los postulados que tenía la radio anterior, no nos servían,
para lo que queríamos hacer. Es decir, queríamos postular a fondos concursables, queríamos hacer una
radio mucho más atractiva, comunicacionalmente hablando, de los cuatro, tres
éramos periodistas excepto Cristian. Por lo que queríamos hacer una radio más
profesional, con una parrilla más estable, con franjas radiales, teníamos todas
esas ideas que las habíamos conversado durante el año. Y como éramos los cuatro
nomás, decidimos embarcarnos. Hicimos hartos ajustes, como éramos cuatro, era
fácil decidir, y una de las cosas fue cambiar de Radio Comunitaria Los Placeres
(RCLP) a Radio Placeres (RP). O sea, sacamos el rol comunitario…. es decir,
podía seguir siendo comunitaria, pero ya no de Placeres, sino de Valparaíso. Y
como habíamos previsto, comenzamos a hacer franjas, postulamos a fondos, nos
ganamos un fondo, compramos equipo, compramos computador, compramos antena,
hicimos toda una cuestión nueva en el fondo y comenzamos a darle duro a las
franjas programáticas. Una por la mañana y una por la tarde.
Yo
creo que esa apuesta que hicimos resultó,
incluso nos habíamos cambiado de cerro, habíamos llegado al subterráneo
del Teatro Mauri……ahí había estado la Radio Atracción, actualmente Radio
Ritoque, con el mismo dueño, César Ramos. Nos habíamos contactado con Andrés
Carramiñana, vimos el lugar, hicimos algunos eventos para juntar plata, y
reacomodamos todo ese espacio. Botamos un muro, pusimos vidrio, pusimos
puertas, candados, una mesa, arreglamos todo lo destruido que había y armamos
la radio otra vez, con la antena ahí mismo, al principio. Se escuchaba mejor,
pero no tanto. En un proyecto al año siguiente, pudimos adquirir la antena para
el equipo transmisor de enlace, que ahora ya no se ocupa por la evolución de la
tecnología. Trajimos una persona de la cuarta región, otra de Santiago, yo creo
que “profesionalizamos un poco la radio”. No lo pudimos hacer tan a cabalidad,
porque no teníamos plata, el Cristian y el Arica iban todos los días y
necesitaban plata pa la micro, muchas veces subieron a pata a la Radio.
Hay decir que el Cristian y el Arica
fueron los pilares de ese resurgimiento de la Placeres, sin ellos dos no sé si
hubiéramos podido levantarla como queríamos, no solamente con entrega y
convicción, sino que con carisma y con una producción a la altura. Con buenos invitados, con panelistas, y la
Radio de a poco se fue transformando en un polo cultural, porque la gente iba
sí o sí al teatro Mauri, sabía que podía ir allá a difundir cualquier tipo de
actividad, hablar por teléfono; gracias a mi trabajo en el Congreso, pudimos
hacer muchas cosas telefónicamente hablando, porque se hacían una suerte de
conferencias telefónica, con las cuales podíamos hacer llamados para todo Chile
gratuitamente. Incluso por esa misma razón, nos colgamos un tiempo del
Noticiero de la radio Nuevo Mundo, una hora todos los días.
También
eso nos dio oportunidad de hacer entrevistas a diputados, senadores, Cristian
tenía la pachorra de sacar a un diputado en vivo, sin problema, porque era muy
buen locutor. Y yo creo, que ese punch que los dos le pusieron a la radio, fue
el saldo a favor que tuvo la radio en ese momento, para captar muchos
simpatizantes, muchos adherentes, gente que quería hacer radio, creo que ese
capital que lanzamos en ese momento, tuvo la radio una presencia nunca antes
vista, hasta el 2009, cuando vienen los tiras.
Es
lamentable los hechos que pasaron, no a la interna sino hacia afuera. Siempre
habían resquemores de otros colegas, de por qué a la Placeres no la bajan……
supieran ellos, ah? Dos veces salimos arrancando con los equipos, y las dos
veces fue lloviendo, para irnos a una casa donde yo vivía, a la vuelta; después
nos llevamos los equipos a otra casa, también lloviendo….la primera vez fue por
una falsa alarma que recibimos, y la segunda vez es cuando llegan y está el
Araya, que me avisa, y esa misma noche se sacan los equipos , y lloviendo y
después se llevan a otras casas……esa otra gente, con esa mirada como de duda,
como que estábamos protegidos por alguien. Yo trabajaba en el Congreso, pero yo
no tenía militancia política, nunca hicimos nada político con ningún partido ni
militante de algún partido. No había contactos, estábamos a la deriva, así es
que después de los apretes de la PDI, de las cosas que pasaron, la radio nunca
más volvió a ser pública.
Entonces,
este equipo editorial, que decíamos era
“centralismo democrático” –como el Lautaro- que tomaba todas las decisiones, las
informábamos nomás a los programas, y los programas nos apoyaban. Pero de a
poco la gente, que no tiene vocación de acompañamiento, tienen vocación de
protagonismo, de trabajar en conjunto,…y eso estuvo bien, porque ya estábamos
cansados, medios agotados, Cristian estaba cada vez con menos tiempo, el Arica
también, necesitaban lucas para vivir, por lo tanto tuvieron que buscar pegas
rentables para subsistir. Y la presión fue tanto, de los programa incluso que
venían llegando, y pasamos de este equipo editorial a una asamblea abierta,
horizontal, como siempre la quisimos. Y desde ya, altiro, comenzamos a trabajar
en comisiones, se repartieron las responsabilidades. Eran responsabilidades pesadas, recuerdo que
cuando recién comenzamos con la radio, transmitíamos viernes, sábado y domingo
y cada uno hacía dos programas, seguidos, por ejemplo viernes de 18 a 22 horas,
sábado y domingo igual. El regreso a la radio, fue así.
Esos
dos programas primeros que hice, fueron “SKA Noticias” y “La Butaca del
Cerro”. El primero era un programa de
música SK A y noticias contingentes, un poco la contingencia de la semana, y
“la Butaca del Cerro” un programa de música de cine, con comentarios de
películas. Cada uno hacía lo suyo, se sumó María José y luego comenzamos a
llenar la parrilla, poco a poco, hasta que tuvimos la parrilla completa, para
toda la semana. Incluso tuvimos que restringir programas, para no tener
programas todo el día. Hubo momentos en que no había música, solamente
programas de conversación, entonces nos dimos cuenta que teníamos que poner
música, franjas de música. Fue todo un
desafío para los tres que éramos periodistas, cómo armar una radio que fuera
escuchada, que fuera atractiva, que tuviera buena música. Yo me jactaba en ese
tiempo, que hacías un paneo por el dial y no encontrabas buena música, hasta
que llegabas a la Placeres y siempre había buena música, …o del gusto de uno.
Entonces hubo también una apuesta musical de la radio, con mucha música local,
nacional, música internacional de los suburbios, creo que esa fue una apuesta
que le dio sentido a la Radio. Muchos auditores escuchaban la música y si después el programa tenía mucho
blabla –excepto con un tema muy, muy interesante- cambiaba el dial.
También
había que ver cómo se hacían programas distintos, no que todos tocaran como el
mismo tema, donde cada programa tuviera su identidad propia. Obviamente existía la comisión de
programación, si se presentaba un programa, lo evaluábamos, le pedíamos un
piloto, para no caernos, para tratar de no equivocarnos. Y creo que se armó una
parrilla interesante, yo vivía para la Radio Placeres, presentamos un proyecto, lo ganamos,
presentamos otro proyecto, lo volvimos a ganar, mejoramos las condiciones
técnicas, nos escuchábamos bien en muchas partes. Recuerdo comentarios de
personas que iban camino a Puchuncaví y escuchaban la radio por la costa. O
gente que iba camino a Santiago y todavía en Placilla se escuchaba, eso
acompañado de una parrilla entretenida.
Recuerdo
una encuesta radial que hubo, porque no hay mediciones radiales, la Archi no la
hace y cuando la hace es porque quiere ganar el pozo; cuando una radio
comercial quiere decir que es por ejemplo, la segunda sintonía, es porque ha
pagado una encuesta. Y esa encuesta que hubo, nosotros figuramos en los
primeros puestos, si bien recuerdo, de 50 radios, y las primeras eran todas
radios nacionales. Hay que reconocer, eso sí, que la escucha radial es muy baja.
Entre
los proyectos que ganamos, y lo hicimos junto con la Radioneta, nos ganamos un
proyecto para cubrir los Carnavales Culturales. Teníamos a Divach en la calle
cubriendo los carnavales, en otro lado estaba Arica, el Zúñiga también, tuvimos
todo el día los carnavales, durante los tres días que duraba, a fines de
Diciembre en ese tiempo, que nos reportó lucas a nosotros. Hicimos un disco
bien bonito, un disco con toda la programación de los Carnavales, con una
carátula bien bonita, de toda la cobertura que le hicimos a los Carnavales. Fue
hermoso, porque los Carnavales en ese tiempo, aunque estaban “contaminados” por
la institucionalidad, pero eran carnavales distintos, se sumaban todas las
calles de Valparaíso, el plan, los cerros, algunos puntos en particular, la
avda. Brasil, era distinto, porque además era una fiesta previa al Año Nuevo.
Era como una seguidilla de pura juerga en
Valparaíso. Yo le decía al Chago
cuando les iban corriendo su Carnaval de los 1000 tambores, que iba a terminar
en el cementerio. Por suerte terminaron en la Avda.Altamirano. Pero cuando
partieron, era en Pedro Montt, con carros alegóricos superlindos.
Era
muy loco esto de que la Radio cubriera actividades “legales”. Nos preguntaban
si podíamos cubrir programas en vivo, y
nadie lo hacía en ese momento, pero nosotros teníamos la capacidad técnica y
humana para hacerlo, en esos años, en ese tiempo. Ahora hay más tecnología. En
esos tiempos lo hacíamos libre, sin prejuicios, y validados también por la
institucionalidad. Qué loco era eso.
Recuerdo
que cuando cumplimos 20 años, hicimos un Encuentro Latinoamericano de radios
comunitarias, en conjunto con la ECO.
Tenemos un afiche, que está en el blog, donde aparece la figura del Che.
Hicimos
una gran fiesta de inauguración el 2004 y se llenó el Mauri. Creo que fue como
en Marzo del 2004, la fiesta de lanzamiento de la Radio. Y luego comenzamos a
hacer fiesta cada cierto tiempo en el Mauri, y eran jornadas imperdibles.
Trabajábamos mucho, previo y en la misma fiesta, y recuerdo que se llenaba.
Incluso algunas las hicimos con música envasada, no con música en vivo, le
poníamos un “concepto” en el afiche, y era música envasada. Y la gente igual iba, se llenaba igual.
Recuerdo que a medianoche, y éramos 30, 30 personas, pero después iban llegando
y se llenaba igual…..la gente está acostumbrada a llegar a esa hora, doce y
media, una de la mañana, y nos iba superbien, y podíamos invertir plata en lo
que necesitábamos. Un trabajo de equipo
muy bueno también. Fue muy linda esa época
Y.
sin embargo, me voy yendo de la Radio. Mi primera ausencia es porque nace mi
hijo, y decido concentrarme en eso y ser padre presente. Estuve como 8 meses ausente de la radio, esto
fue el 2007, sigo articulando algunas cosas nomás, desde mi pega en el
Congreso, pero ya no hago programas, no voy a asambleas, voy a cosas muy
puntuales solamente. Vuelvo a la radio, vuelvo a meterme en comisiones, y me
pego una segunda alejada el 2011, cuando nace mi otro hijo.
Pero
eso coincide con mi cambio de trabajo, en el 2011 me vengo a trabajar al Parque
Cultural exCárcel. Y desde el 2007 adelante, había llegado otra gente a la
radio, gente con savia nueva, con miradas más puntudas, con ganas de hacer
cosas, pero bien puntudas, lo que era excelente. Y a algunas personas les
pareció peor que yo me viniera a trabajar acá, que lo hiciera en el Congreso. Y
eso pasó, porque este Parque Cultural se abrió en el gobierno de derecha. Se
trabajó en el gobierno de la Concertación, se hace todo en ese gobierno, los
estatutos, la dirección, los votos en el directorio, los grupos, los
trabajadores, etc., pero se abre en el gobierno de Piñera. Y eso confundió un
poco las cosas, era que como yo me venía a trabajar acá, iba a trabajar por
Piñera. Cruz Coke, el Ministro, nombra a Justo Pastor y éste trae su equipo. Pero
no lo puede traer entero y quedan algunos puestos vacantes. Yo me había
preparado siempre para trabajar en cultura, que es lo que me gusta, y que puedo
aportar a través de la cultura, que a través de esto, se pueden hacer muchas
cosas. Entonces comencé a instruirme en
Cultura, comencé a estudiar, hice un diplomado, hice un magister, después hice
un Taller, siempre ligado a la cultura. Trabajé con agrupaciones culturales,
hice una revista de cine, y otros. Entonces se presenta esta oportunidad. Yo era
amigo de los artistas, siempre lo he sido, y coincidentemente, tenía amigos
artistas que trabajaban en esta exCárcel
Entonces
yo entiendo que alguna gente de la Radio haya pensado que yo me venía a
trabajar con Piñera. Entonces, cuando yo me voy por segunda vez de la radio, y
quise volver, me doy cuenta que hay esta especie de reticencia, de distancia conmigo….. además, yo me había
embalado en este proyecto de la exCárcel, donde estoy en Comunicaciones, tenía
mucha pega, muy poco tiempo, y decido no volver. Una vez envié una carta a la
Radio, y creo que se entendió mal la carta. Yo decía que había llegado gente
nueva, con ideas frescas, quizá algunos ya estábamos medio anquilosados, con
otra mirada, qué bueno que llegó gente nueva. Y se entendió como que yo estaba
separando aguas, ustedes y nosotros. Eso nunca fue mi intención, pero con esta
suerte de rechazo interno que percibía, yo decido que es mejor no volver.
Además la Radio estaba bien, muy parada,
muy entera.
Tengo
lindos recuerdos de todo ese período, incluso escucho la Radio online, está
linda la página, importante rescatar la historia en el blog, yo siempre quise
hacer la historia de la Placeres, pero sentía que era como mirar la radio desde
lejos.
Este
último año, he pensado mirar la radio desde cerca, he pensado en hacer un
programa, inclusive.
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